Al llegar, comience por el registro
Salvo acuerdo específico con el camping, en verano, su llegada debe ser después de mediodía ya que las salidas se hacen obligatoriamente por la mañana, teniendo que dejarse los alojamientos al mediodía a más tardar. Moraleja, no sirve de nada ir corriendo y llegar demasiado pronto, teniendo en cuenta que en temporada alta la recepción se hace a menudo hasta las 19-20 h. Si en el caso de un alquiler es muy raro que se pueda estar menos de una semana completa (sábado-sábado), sepa que para una parcela los campings son mucho más flexibles. Aproveche la oportunidad para evitar los atascos de los principales fines de semana.
A su llegada, la recepción es un paso obligatorio para cumplimentar las formalidades de admisión. Si el camping no tiene que conservar su documento de identidad durante su estancia, tiene el derecho de reclamárselo para hacer una fotocopia durante el registro.
La llegada a su alojamiento
Generalmente, un empleado del camping le acompañará hasta su alojamiento.
En cualquier caso, preste especial atención a instalarse preservando la tranquilidad de los vecinos, usted agradecería lo mismo si estuviera en el otro lado. Así pues, pare el motor, la radio y evite la clásica llamada a los padres para decirle a voces que ha llegado bien: sus vecinos de camping ya lo saben. Antes de instalarse, en tienda o en caravana, observe las zonas con sombra y con sol para colocarse bien (tenga también en cuenta a las instalaciones vecinas). En el momento de organizar sus cosas, procure no sacarlo todo de manera que su parcela parezca un gran bazar.
En lo que respecta a los alquileres, hará falta realizar una supervisión inicial. Aunque le parezca fastidioso, es preferible. Si no lo puede hacer un empleado, compruebe que no falte nada de la lista que se le ha entregado y señale inmediatamente las anomalías que encuentre (cristal fisurado, horno sucio, etc.). Su fianza depende de ello.